La Tomaquera

La Tomaquera no s'aguanta sola. Ves quina inutilitat de planta, que de tan domesticada ja no dóna fruït sense que li donin canya. Però ja és això. Cal cuidar i donar canya a les coses que es volen. Aquest blog no pretén més. Rajar de tot plegat sense perdre les ganes per treure'n fruït. Hi esteu convidats i convidades.

divendres, d’octubre 20, 2006

Montilla's Commitments


M'ha arribat a casa els "10 compromisos de José Montilla"

Un breve análisis, así a bote pronto:

1. Gratuidad de libros de texto en 4 años.

Porque impulsar redes escolares para compartir los libros no, verdad?

2. Hacer un pais trilingüe, con el inglés como tercera lengua.

Ésta es una de las 10 prioridades... la educación no tiene problemas mas urgentes...

3. Dentista a los niños de 6 a 14 y a las personas mayores con baja renta.

Ambicioso... ufff

4. Gafas y audífonos a personas mayores con baja renta.

Y si además, y sobretodo, aumentamos esas rentas...?

5. 60 nuevos barrios para rehabilitar, en la Ley de Barrios iniciada esta legislatura.

Hombre! una sin pegas...

6. 1500 hectareas de suelo industrial y otra actividades económicas (sic), con un potencial de 120.000 puestos de trabajo.

Otras actividades son parques de ocio? Qué industria queremos? Irá acompañada de I+D o serán puesto de trabajo de baja cualificación? Un puesto de trabajo por cada 125 metros cuadrados...

7. Apostar por energías renovables, multiplicando por 7 la energía eólica producida.

Como sea con la planificación y agilidad mostrada por Pepe como Ministro de Industria...
Eso sí, la prioridad la eólica, controlada por empresas, no la solar que te la puedes poner en tu casa. Y del ahorro y eficiencia energética ni hablamos.

8. Traspaso de recursos a los ayuntamientos, hasta el 25% en 4 años.

Ostia! otra que está bien!

9. Formación a medio millón de personas para que encuentren trabajo o mejoren el que tienen.

Como siempre, la culpa del desempleo, la falta de formación, cualificación y, ya puestos, de los accidentes laborales es de la gente o de la administración. Las empresas no tienen nada que ver.

10. Viviendas de Potección Oficial. 25.000 de compra y 25.000 de alquiler. Rehabilitar 1000.000 pisos.

Compra... en qué régimen? Se podrá especular, como defendía tambien la UGT? A precio tasado?


Molts dubtes, ni una paraula d'equilibri territorial, ni de cultura; propostes secundàries sobre temes importants; cap aclariment sobre amb qui es pactarà... Quo Vadis, Pepe?

dijous, d’octubre 19, 2006

La pell fina


En aquest pais la gent té la pell molt fina. Durant molts anys s'ha parlat del seny català, de l'oasi de la política catalana.
I be que ho semblava, mentre governava la dreta i l'esquerra exercia de responsable oposició.
Però la dreta van perdre ("És com si ens haguessin fet fora de casa" que deia la Ferrusola), i l'oasi es va desertificar. El seny va donar pas a la mala llet, a la mentida i a la desqualificació gratuïta.

Però l'esquerra ha de seguir sent impoluta i exemplar. L'esquerra no pot caure en això, l'esquerra ha de posar l'altra galta, l'esquerra és gilipolles!

Ja n'hi ha prou. La retirada de la campanya "Folla't la dreta", de Joves d'Esquerra Verda és un exemple del "doble rasero" amb que es mesuren les activitats polítiques.

El subnormal del senyor Cuní ha entrat a sang i fetge (la voz de su amo), Catalunya Ràdio ha posat el crit al cel perque la frase tenia una falta d'ortografia (no us escandalitzareu per que la gent es quedi al carrer, no...) i un llarg etcètera que demostra que ser periodista és, pasada la nota de tall per entrar a la facultat, la cosa més fàcil del món.


Al pan pan y al vino vino.

I dilluns Miralles acusant a CiU d'haver repartit mil milions de pesetes a "escoles pijes". Si, senyor!! Les coses pel seu nom!

Altre motiu per votar ICV-EUiA. Descaradament d'esquerres!!

dimarts, d’octubre 10, 2006

L'espai de tothom, pel be d'uns pocs.

No soc jo fan de certs moviements que s'autodenominen representatius però que després són mes hermètics que una cimera de caps d'Estat. Ja ho sabeu.

Però malgrtat això... alguna cosa no estem fent be i, en Manuel Delgado, Pepito Grillo donde los haya, ens ho recorda...

TRIBUNA: MANUEL DELGADO
El 'forat de la vergonya'
EL PAÍS - 10-10-2006

Hemos sido testigos en apenas unos días de dos acontecimientos estrechamente vinculados entre sí, cara y cruz de un mismo proceso de transformación urbanística del casco antiguo de Barcelona. Una mañana el alcalde inauguraba solemnemente las nuevas instalaciones de la Universidad de Barcelona en el mismo núcleo del Raval donde se levantan el Macba y el Centro de Cultura Contemporánea (CCCB), dos de los grandes contenedores culturales de la ciudad. A la semana siguiente, a poca distancia, en el barrio de la Ribera, podíamos contemplar la pavorosa imagen de los antidisturbios de la Guardia Urbana protegiendo el arrancado de las tomateras que los vecinos habían plantado en el forat de la vergonya, un solar a unos metros del mercado de Santa Caterina, la única zona realmente verde -y no gris- que había en todo el Casc Antic.
La interpretación de tal coincidencia no es difícil. Ambos momentos representan los episodios más recientes de una vieja dinámica de lo que los urbanistas llaman "esponjamiento" o "higienización" de Ciutat Vella, consistente en desenmarañarla y limpiarla; es decir, resolver los problemas de control que implicaba su tendencia a la opacidad y deshacerse de los elementos tanto inmuebles como humanos que pudieran suponer un obstáculo para la reapropiación del barrio por parte de clases medias y altas ansiosas de un baño de venerabilidad histórica, debidamente sazonada con elementos de ese nuevo sabor local que da el multiculturalismo e incluso de un moderado toque canalla. Para ello, se inyecta saber, cultura y sano ambiente juvenil allí donde antes había solamente vida y prosigue la campaña de deportación y borrado de pobres en marcha desde hace años en el sector.
Lo sucedido en el forat de la vergonya es bien ilustrativo de esa dinámica, a la que se asigna el eufemístico título de "rehabilitación". Como se recordará, en aquel solar de 5.000 metros cuadrados el Ayuntamiento tenía prevista la apertura de un aparcamiento a disposición del turismo cultural que acude al área ya debidamente desinfectada de la calle de Montcada y los alrededores del Museo Picasso, el Born y Santa Maria del Mar. Allí, una colosal mutación urbanística había empezado a restaurar edificios para dedicarlos al comercio de alto nivel, a la venta de lofts para profesionales con éxito y al alquiler de apartamentos para esa pequeña multitud de extranjeros con dinero que los están convirtiendo en residencias de vacaciones o de fin de semana.
La operación no cuajó como consecuencia de la resistencia de los habitantes, que se apropiaron de un espacio que consideraban suyo y del que hicieron un insólito vergel urbano. Jardín, huerto, zona de juegos infantiles, tarima para espectáculos, modestas canchas de fútbol y baloncesto, mobiliario..., todo había sido elaborado a mano por los vecinos, con unos criterios estéticos a años luz de la afectación formal de los llamados "espacios públicos de calidad", cuya característica suele ser que parecen diseñados para ahuyentar a sus posibles usuarios. Allí se podía ver en todo momento a gente de todas las edades convirtiendo la plaza en un lugar de sociabilidad que, por otra parte, representaba la encarnación del multiculturalismo real, no el de los prospectos oficiales, sino el de seres humanos de carne y hueso que encontraban por fin un lugar donde encontrarse. No en vano, el lugar había sido vindicado como la auténtica plaza Mayor del barrio, y así se propuso en el pregón de su última fiesta mayor.
Pues bien, eso es lo que nuestras autoridades parecían incapaces de soportar: que se hubiera suscitado de forma espontánea todo un apasionante experimento de autogestión, un emocionante ejemplo de cómo los vecinos de un barrio podían generar sin permiso escenarios para su vida cotidiana, de espaldas a la insaciable voluntad municipal de monitorizarlo absolutamente todo y de sólo tolerar las formas de estar en el espacio urbano homologadas previamente por sus técnicos en ciudadanía y sus expertos en convivencia. No se podía tolerar un espacio público que fuera realmente público; es decir, del público. Esa imagen de niños jugando en parques que ellos no habían dispuesto, de abuelos charlando en bancos que ellos nunca instalarían en sus plazas, significaba para ellos el más inaceptable de los desacatos.
Por desgracia, tuvo que producirse un problema de orden público para que la sentencia de muerte contra el forat de la vergonya fuera recogida por los medios de comunicación. Las imágenes de jóvenes lanzando cohetes de feria contra la policía y de la profanación del Macba sirvieron para que los portavoces oficiales -todos- desfigurasen las vindicaciones vecinales y volvieran a agitar el fantasma del Okupa Feroz, con lo que, de paso, insistían en malignizar al movimiento que inició y está encabezando una lucha de los jóvenes por el derecho a la vivienda que se extiende por momentos.
Esta vez han vuelto a ganar y a perder los de siempre. Pero así se escribe la historia. Como sincronizados, una solemne inauguración y un desalojo a la fuerza. Se levanta un nuevo templo en el que el Saber y la Cultura oficiarán sus misterios y, muy cerca pero también muy lejos de allí, se desbarataba una ilusión colectiva forjada a ras de suelo. La ciudad hecha poder y hecha dinero se ha vuelto a salir con la suya y ha conseguido derrotar -como siempre, sólo por el momento e inútilmente- a esas sustancias básicas de toda vida urbana que son el amor por la vida y la manía de desobedecer.
Manuel Delgado es profesor de Antropología urbana en la UB.